COMPETENCIA COMUNICATIVA


EL DESARROLLO DE LA COMPETENCIA EN COMUNICACIÓN LINGÜÍSTICA A TRAVÉS DE UN PROYECTO DE CENTRO
Descripción de nuestro Proyecto para la Mejora de la Competencia en Comunicación Lingüística. 


Cuando nos referimos a la competencia en comunicación lingüística estamos muy probablemente  hablando de la competencia básica por excelencia. No en vano, el lenguaje es el instrumento fundamental que nos acerca al mundo del conocimiento en cualquiera de sus campos.
De ahí la importancia de la adquisición y desarrollo de esta competencia como uno de los objetivos primordiales de la etapa de escolarización obligatoria. Sólo si dotamos a nuestro alumnado de los recursos necesarios, facilitándoles contextos en los que deban poner en práctica las diferentes destrezas comunicativas, estaremos abriéndoles la puerta al conocimiento.
Sin lugar a dudas, ésta no es responsabilidad única del profesorado de lenguas, aunque su papel como mediadores y encargados de desentrañar sus mecanismos de funcionamiento –conocimiento de los códigos lingüísticos- y ofrecer un nutrido repertorio de textos orales y escritos resultará a todas luces fundamental.
El profesorado de otras materias también tiene responsabilidad directa en el desarrollo de la competencia en comunicación lingüística, especialmente cuando ésta se entiende y es tratada como un contenido transversal del currículo.
Éste es el planteamiento que hace ahora tres cursos movió al IES Sánchez Lastra a unirse a la invitación del Organismo Autónomo de Programas Educativos Europeos (OAPEE) y la Consejería de Educación del Principado de Asturias a formar un equipo de trabajo encargado de liderar, coordinar e integrar una serie de iniciativas de centro encaminadas a mejorar esta competencia en nuestro alumnado, así como a difundir y hacer partícipe a toda la comunidad escolar del rico trabajo realizado en las aulas y de los muchos proyectos y actividades que contribuyen a la dinamización de nuestro centro.

Claves organizativas y fundamentos básicos
La puesta en marcha y consolidación de un proyecto de centro de estas características requiere fijar unas líneas de trabajo que permitan avanzar, respetando siempre el contexto específico del centro y los recursos reales disponibles (tanto humanos como materiales).
Basados en nuestra propia experiencia en el IES Sánchez Lastra, diríamos que esos ejes claves de trabajo se sustentan en cuatro pilares básicos:
1. Una planificación clara y contextualizada, que atienda a una serie de fases de desarrollo del proyecto y marque el estilo propio con que el centro se distinguirá a nivel metodológico y de dinamización general de la comunidad educativa.
2. La implementación real de los actuales currículos de lenguas, elaborados todos ellos a la luz del Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas, con una clara apuesta por el enfoque comunicativo, basado primordialmente en el uso funcional de las mismas, el desarrollo de las distintas destrezas y la adquisición de competencias básicas.
3. Una eficaz coordinación, que facilite la sistematización del trabajo, la eficacia y operatividad de las reuniones, la toma de acuerdos y la evaluación continua de los progresos alcanzados, analizando logros y dificultades encontradas y propiciando nuevas propuestas y enfoques que nos ayuden a avanzar en los objetivos fijados para cada etapa del trabajo.
4. La integración de iniciativas y proyectos de centro, que permita establecer puentes de unión que enriquezcan el trabajo, los resultados y el impacto de los mismos en la comunidad escolar.

Por su importancia indudable en el desarrollo de la competencia en comunicación lingüística, dado además su carácter normativo, merece la pena detenerse un momento en algunos aspectos fundamentales recogidos en nuestros currículos (Decreto 56/2007, de 24 de mayo y Decreto 74/2007, de 14 de junio por los que se regulan las enseñanzas de Primaria y Secundaria en el Principado de Asturias) y en el anexo referido al desarrollo de competencias básicas en la etapa educativa obligatoria.

Bueno es comenzar citando la definición que el mencionado anexo hace de esta competencia y de los objetivos finales a alcanzar:
“Esta competencia se refiere a la utilización del lenguaje como instrumento de comunicación oral y escrita, de representación, interpretación y comprensión de la realidad, de construcción y comunicación del conocimiento y de organización y autorregulación del pensamiento, las emociones y la conducta”.
“... El desarrollo de la competencia lingüística al final de la educación obligatoria comporta el dominio de la lengua oral y escrita en múltiples contextos, y el uso funcional de, al menos, una lengua extranjera”.

Tanto la importancia del desarrollo de esta competencia que, como ya hemos dicho, es la llave principal de acceso al conocimiento en cualquiera de las materias que componen el currículo, como la meta a alcanzar están planteadas en términos muy claros y concisos. Nuestra labor está perfectamente definida: facilitar que todo eso se produzca proporcionando los contextos, materiales y recursos más adecuados para ello y, sobre todo, favoreciendo situaciones en las que nuestro alumnado tenga que leer, escuchar, escribir, hablar y conversar. Tan simple –y tan complicado- como eso.

De un análisis pormenorizado de nuestros currículos de lenguas, tanto en Primaria como en Secundaria, extraemos a continuación los aspectos fundamentales que se repiten en todos ellos y que conforman lo que podríamos denominar sus “señas de identidad”.

  1. Todos los currículos de lenguas están basados en el Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas y, por tanto, otorgan especial énfasis al enfoque comunicativo y el uso funcional de las lenguas.
  2. Se plantea en todos una progresión de objetivos desde la etapa primaria a la secundaria. Es decir, se trata de un desarrollo gradual de la competencia comunicativa que abarca toda la escolarización obligatoria y que implica, por tanto, un planteamiento metodológico común dirigido fundamentalmente al desarrollo efectivo de las distintas destrezas comunicativas.
  3. En todos los currículos hay menciones al enfoque integrado de la enseñanza de lenguas y a los proyectos lingüísticos de centro o planes coordinados de centro, así como al desarrollo de una competencia plurilingüe. Se insiste en la importancia de la coordinación a la hora de armonizar objetivos y contenidos, plantear metodologías, terminología lingüística y procedimientos e instrumentos de evaluación comunes.
  4. Por último, se pone énfasis en el papel de las lenguas como vehículos para la construcción del pensamiento y del conocimiento y su clara conexión con el desarrollo del resto de competencias básicas.

Claves metodológicas
Aunque, como ya hemos apuntado, no cabe duda de que el profesorado de lenguas tiene una responsabilidad esencial a la hora de facilitar el desarrollo de la competencia en comunicación lingüística, desde el resto de áreas y materias la contribución es igualmente de primer orden. Todos utilizamos el lenguaje a la hora de transmitir conocimientos. Asimismo, todos los procesos de aprendizaje y enseñanza están íntimamente ligados a destrezas de comprensión y expresión oral y escrita.

A lo largo del primer trimestre del presente curso escolar, y aprovechando la incorporación de nuevos miembros al equipo de trabajo del proyecto, nos planteamos reflexionar sobre nuestras prácticas habituales de aula en relación con el desarrollo de las distintas destrezas comunicativas. Aunque no resultó especialmente sorprendente comprobar cómo desde todas las materias son numerosísimas las actividades y tareas que tienen que ver con escribir, leer, escuchar, hablar y conversar, la toma de consciencia sobre la contribución de todos al desarrollo de la competencia comunicativa , esa visión de la lengua como eje transversal que ya se ha mencionado anteriormente, ha quedado perfectamente patente y nos ha reforzado en la idea de continuar explorando las líneas de trabajo que nos hemos marcado.

Precisamente uno de los objetivos que nos hemos propuesto desde el principio ha sido el de propiciar los cambios metodológicos necesarios para garantizar el desarrollo de la competencia en comunicación lingüística y, por extensión, del resto de competencias básicas. Somos conscientes de que el éxito de esta empresa va a depender en gran medida de lo que hagamos en el aula día a día y del modo en que evaluemos ese trabajo. Para avanzar en esta dirección nos hemos basado en dos elementos clave. Por un lado, incorporar la filosofía del Portfolio Europeo de las Lenguas a la planificación didáctica, la sistematización del trabajo de los aprendices y a la reflexión y evaluación sobre su propio proceso de aprendizaje. Por otro, asumir el trabajo por proyectos como la herramienta más eficaz y completa a la hora de trabajar de un modo integrado todas las destrezas y contribuir significativamente al desarrollo de las competencias básicas citadas en los currículos.

He aquí algunos ejemplos gráficos de materiales elaborados por el grupo de trabajo y que pueden servirnos para ilustrar este tipo de metodología.
 



Ficha-modelo de planificación trimestral. Destrezas comunicativas, competencias básicas y realización de proyectos están presentes en ella.
Incorporar todos estos elementos en nuestra planificación didáctica ayuda a centrar objetivos y nos compromete con una metodología muy concreta.


Planificación personal y toma de decisiones.
Entendemos que el aprendiz debe asumir un papel activo en su propio proceso de aprendizaje y, como consecuencia, tomar también sus propias decisiones basadas en su estilo de aprender. Esta ficha, inspirada en el Portfolio Europeo de las Lenguas de Secundaria –al igual que las que vienen a continuación- puede ser una herramienta útil para que, desde el principio del trimestre, el aprendiz decida sobre sus propios objetivos de aprendizaje y qué hará para conseguirlos. Entran en juego, pues, aspectos claves del aprendizaje como la responsabilidad o la autonomía.

 
 Selección de los mejores trabajos
                                                                              Reflexión sobre el aprendizaje y autoevaluación

Un modo de revisar y reflexionar sobre lo que se ha hecho a lo largo del trimestre y valorar los propios progresos, así como plantear nuevas metas de aprendizaje.


Como ya hemos indicado, el trabajo por proyectos es otra de las claves metodológicas presentes en nuestra planificación didáctica. La ilustración muestra la ficha-modelo que hemos elaborado para el diseño de proyectos, en la que nuevamente se recogen tareas directamente relacionadas con el desarrollo de las distintas destrezas comunicativas y las competencias básicas.
Hemos podido constatar en estos cursos que el grado de motivación del alumnado aumenta considerablemente al plantear este tipo de trabajos. Un buen diseño es esencial, por lo que, aparte de asegurar su integración curricular, es importante aprovechar las experiencias de los estudiantes en el marco de diferentes actividades de centro: participación en programas institucionales de ámbito autonómico, estatal y europeo, tales como programas bilingües, educación para la salud, TIC, Biblioteca Escolar, implementación del Plan Lector e Investigador de centro, proyectos Comenius y todo tipo de actividades complementarias y extraescolares programadas por los distintos departamentos didácticos… No en vano, aprender de la experiencia es mucho más eficaz que cualquier otro método, lo que nos permite afirmar que el conocimiento y habilidades adquiridas en esos contextos permanecerán activos durante mayor tiempo.

Difundir el trabajo y dinamizar la vida del centro 
La difusión y visibilidad del trabajo son también aspectos muy importantes que intentamos potenciar.  Estrechar vínculos dentro de la comunidad escolar y dar a conocer todo el trabajo que se realiza desde los distintos proyectos, iniciativas y actividades en los que el centro participa nos proporciona el contexto perfecto para que nuestros propios alumnos narren sus experiencias, presenten sus trabajos y compartan impresiones sobre sus resultados, lean y comenten noticias en los diferentes blogs, disfruten con la participación en representaciones, videoclips, talleres, charlas, exposiciones, jornadas…
Todo ello creemos que constituye un buen modo de dinamizar la vida del centro, acercar más a los colectivos que componen nuestra comunidad escolar y, ante todo, nos permite que nuestros alumnos y alumnas –de todos los grupos y niveles- lean, escriban, escuchen, hablen, conversen… En fin, que mejoren su competencia comunicativa de una manera significativa, desde la experiencia de ser verdaderos protagonistas y narradores en primera persona de todo lo relacionado con su vida escolar.

Proyecto Comenius SKILL
 COMENIUS SKILL.
Familias, profesorado y estudiantes compartiendo una jornada de convivencia durante la estancia de nuestros socios en Mieres.





Jornada de Puertas Abiertas






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Para conocer más  sobre Experiencia piloto para la mejora de la competencia en comunicación lingüística

http://web.educastur.princast.es/ies/sanchezl/programas/competencia_lingfcedstica.html

Margarita Valdés











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